El
relámpago del Catatumbo es un increíble fenómeno meteorológico que se presenta
durante los 365 días del año en la cuenca del lago de Maracaibo en Venezuela,
principalmente en la zona sur de dicho lago y en la cuenca inferior del río
Catatumbo, de donde procede su nombre. Es una tormenta eterna la cual brinda un
espectáculo único en el Mundo.
El
primer escrito donde se menciona al relámpago del Catatumbo fue el poema épico
"La Dragontea" de Lope de Vega, publicado en 1597, narrativa de la
derrota del pirata inglés Francis Drake por el alcalde de Nombre de Dios, Diego
Suárez de Amaya. El naturalista y explorador prusiano Alejandro de Humboldt lo
describió como "explosiones eléctricas que son como fulgores fosforescentes".
Fue reseñado luego por el geógrafo italiano Agustín Codazzi como un
"relámpago continuado que parece surgir del río Zulia y sus
alrededores".
El
relámpago del Catatumbo es admirado por la sociedad venezolana, en especial en
el estado noroccidental del Zulia, el cual tiene un rayo en su escudo oficial
para simbolizar al fenómeno. También la letra del himno del Estado Zulia, cuyo
autor es el zuliano Udón Pérez, incluye una estrofa que hace referencia a este
fenómeno. La etnia wari lo define como “la concentración de millones de cocuyos
(luciérnagas) que todas las noches se reúnen en el Catatumbo para rendirle
tributo a los padres de la creación”, mientras que los yucpas y los wayúu lo
atribuyen a la presencia de los espíritus de los guajiros caídos que
resplandecen como una especie de mensaje, además de considerarlo el
"eterno resplandor en las alturas".
El
Relámpago es una fuente de ozono sin igual y el primer generador de
electricidad de origen tormentoso del planeta. Habitualmente tiene un promedio
de 28 descargas eléctricas por minuto, 7 horas diarias, 140 días (recurrencia
mínima) y produce 1.646.400 descargas eléctricas al año. En
10 minutos de recurrencia genera la energía necesaria para encender las
bombillas eléctricas existentes en Sudamérica. Es muy fácil de ver desde
cientos de kilómetros de distancia, también se conoce como el “Faro de
Maracaibo”, ya que las embarcaciones que surcaban la zona podían navegar
durante la noche sin problemas en la época de la navegación a vela. Hasta
ahora, ningún fenómeno meteorológico ha sido considerado patrimonio de la
humanidad. Sin embargo, el ambientalista venezolano Erick Quiroga considera que
los relámpagos del Catatumbo cuentan con todas las condiciones para serlo. Fue
Quiroga quien hace unos años inició la campaña para que este fenómeno zuliano
obtuviera el récord Guinness por mayor cantidad de relámpagos en menos tiempo
en el mundo. Lo logró en enero de 2014, cuando la Guinness World Records
formalizó el título.